Wednesday, November 30, 2011

Monday, November 28, 2011

Thursday, November 24, 2011

Tuesday, November 22, 2011

Tuesday, November 8, 2011

Tuesday, November 1, 2011

Thursday, October 27, 2011

Soñé que no soñaba



Mundsburg halte Stelle, 9:10 AM

Tuesday, October 25, 2011

air awaits

The rope is giving you blisters.
Can’t you see?
Loosen your fingers,
now loosen your grip.
It hurts now, but who feels it.
Let th rope slowly slide down.
Watch it fall to the ground.
Observe your empty hand.
Now it’s free to do whatever.
It’s free to caress, not to trap.
It’s open to wave hello and goodbye.
It has space in it for infinite possibilities.
You can see its lines, color and texture.
You can see it has no intentions.

Your hand was a slave of that rope.
The only thing it was trapping was itself.
Now it’s free.
Move your fingers.
Make them play with the air.
See the light fly through them.
Be free.
Ignore the ropes.
Never stop playing.
Play again with the air.
The air that surrounded you that first moment.
The air that takes you anywhere.
Just love the air.
That’s it.

Tuesday, June 7, 2011

Brindo

Brindo porque no me vuelva a gustar un cobarde.
Brindo porque la falsa galantería no me divierta.
Brindo porque la determinación me deslumbre.
Brindo porque tu calvicie me repugne.
Brindo por la existencia de las fáciles, tontas y feas.
Brindo porque son ellas quienes quitan la máscara del que no vale la pena.

Brindo porque el ego no me confunda
Brindo porque la realidad se revele
Brindo porque en mi vida el huevón no triunfe
Brindo porque tus sobras nunca me llenen

Brindo porque tu destino ya no me importe
Brindo porque tu mirada no me llame
Brindo por darme cuenta de tu vacío
Brindo por saber que tú nunca llenarías el mío

Brindo por detectar tu ruin oferta
Brindo porque otro me enamore,
Brindo al ver que en verdad nunca me enamoraste,
Que tu ventaja era mi aburrimiento,
Que no me agarraste a mí sino a mi ego.

Mil veces brindo
Brindo por ti,
porque así como llegaste, yo me fui.
Brindo porque me enseñaste lo que no quiero.
Brindo porque fuiste lo malo que me hace apreciar lo bueno.

Brindo porque tu chiste repetido me aburra
Brindo porque tu guión prefabricado no cale
Brindo porque la falsedad nunca es espontánea
Brindo porque tu segundo de luz no me confunda
Brindo porque la dulzura me maraville
Brindo porque en lo auténtico me hunda

Brindo porque tu inseguridad no me hiera
Brindo porque mi esencia siempre prevalezca
Brindo por no arruinar al pobre
Brindo por no desgraciar a la desgraciada

Brindo por conocer un aventurero
Brindo porque mis palabras no le den miedo
Brindo porque mi intensidad sea sólo un juego
Para ese que es tan hombre que se vacila mi fuego
Brindo por aquellos que disfrutan el reto
Por los que encuentran reto seduciendo una vida

Brindo por nunca sentirme derrotada.
Clinc.

Sunday, February 20, 2011

Ronrisas

Mis dientes están completamente ásperos. El cielo de mi boca es una lija que raspa mi lengua cada vez que se rozan. Mi garganta tiene un sabor peor que desagradable. Cuando entreabro los labios siento que no tengo ni una sola gota de saliva en mi boca.

Las lagañas no me dejan abrir los ojos completamente. El sol me quema, me hace sudar y un hedor extraño brota de mis poros, me da destellos de las últimas horas, me da náuseas. A mi lado está un extraño, su situación puede que sea igual o peor a la mía. Él maneja, no me importa a dónde me lleva.

“¿Dios qué es esto?” Pienso, y el extraño responde “Deja el drama. Todo esto es tu culpa”. Supongo que pensé en voz alta. Me mira de arriba abajo. Mis medias de nailon negras están completamente rotas. Mi vestido era blanco, ahora es un festín de ocres, grises y negros. El maquillaje oscuro que en un momento adornó mi cara, ahora la hace parecer una pintura surrealista; en vez de derretirse un reloj, se derriten mis ojos y mi boca parece la de un trágico payaso.
Cuando el extraño recorre mi imagen me dice “Eso de que las mujeres son lindas cuando despiertan en la mañana, no va contigo”. A pesar de mi estado de desidia y resaca, me toma por sorpresa. “Idiota!”. El extraño ríe. Yo volteo hacia la ventana para esconder mi sonrisa.

Llegamos a una especie de desierto. La arena hierve entre los dedos de mis pies, el sol no cede. El extraño arroja unas cholas cerca de mí. Las veo, lo veo. Una desquiciada enérgica empieza a correr en nuestra dirección. Es fresita en ácido, no la soporto. Por alguna razón sabe mi nombre. El extraño la saluda sonriendo y me doy cuenta de que lo conozco. No sólo eso, lo amo.

La resaca de anoche es más grande que la del mar que se abre ante mí. Ah sí, no era un desierto; mi cuello no daba para más así que vi apenas 13 metros cuadrados de arena a mi alrededor. Al erguirme un poco más vería el agua salitrada, más agradable que fresita, más atractiva que mi extraño.

-Dónde está tu traje baño? Y el protector? Cuidado con esas piedras!!
-Métete en ropa, naranjita!
-Que no me digas así, coño!

Eso fue lo último que escuché antes de lanzarme al agua en mi vestido y golpearme con las benditas piedras que el extraño advirtió.

Par de horas más tarde, estaba acostada con un ron en la mano y escuchando el charrasqueo de una guitarra, un charrasqueo que ya hace mucho me había enamorado, y que hoy volvía a hacerlo en las manos de ese extraño.

................... CONTINUARÁ ....................

NO ME GUSTA

No me gusta cómo tomar un camino implica renunciar a otros.
No me gusta cómo desear trunca el deseo y cómo luego éste se cumple cuando ya no deseas más.
No me gusta querer controlar y descontrolarme cuando no controlo.
No me gusta perseguir el placer.
No me gusta huir del dolor.
No me gusta no confiar en la vida y en su plan.